domingo, 23 de octubre de 2011

Libros que nos esperan

Mi abuela tenía siempre una provisión de alimentos esenciales por si sucedía algo imprevisto, guardaba tarros de leche, aceite, dulces, tal vez recordando alguna etapa de su vida en la que sufrió la falta de algo. Yo tengo una provisión de libros como para leer el resto de mi vida. Así como el ojo es más grande que el estómago y nos servimos en el plato más cantidad de la que podremos comer, imagino que tendré muchísimas horas que podré dedicar a la lectura. Cuando viajo mi mayor placer es comprar libros. A veces compro libros que ya tengo, entonces, al darme cuenta, los regalo, pero nadie me quita la dicha de estar en una librería recorriendo con ojos y dedos los anaqueles buscando esos tesoros que llevaré conmigo. Con los años he aprendido que me gustan algunas editoriales, normalmente pequeñas, que hacen libros de autores nada famosos pero que tienen una obra delicada y hermosa. También creo en la comunicación que se establece entre ciertos libros y yo. Entro en una librería y uno de los libros me mira fijamente, me hace gestos, me pega una llamada que yo siento y me dirijo a él con mucho cariño, sabiendo que he encontrado una perla muy especial, y claro, lo llevo conmigo. Los libros tienen paciencia y esperan en casa, tranquilos a que los tome entre las manos alguna tarde cuando la casualidad me lleve a ellos.
Compré en el norte de España un libro precioso: "El festín de Babette", de Isak Dinesen, escritora danesa, yo había visto la película y gozado con esa historia en donde la comida es la protagonista pero en donde también se habla de una comunidad religiosa y estricta y del orgullo y generosidad de una mujer, Babette, que disfruta mostrando en un banquete, todo lo que ha aprendido en la vida. Cocinar es un arte, es compartir, es seleccionar ingredientes y transformarlos para que los demás se transformen a la vez con el deleite de la belleza y la combinación de sabores. Babette gasta toda su fortuna en una tarde en un pueblo de pescadores en la costa de Noruega, y eso otorga sentido a su vida.
Las ilustraciones del libro están hechas por Noemí Villamuza, una chica española que lleva más de veinticinco libros publicados.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu comentario es de gran utilidad para para Abraelazuldelcielo. Ce.