Desde Paris -como si lo trajese la cigueña- me llega de mi amiga Josefina, este artículo que comparto con ustedes porque me parece muy cierto, la edad está en nuestra mente y lo que hagamos o dejemos de hacer depende exclusivamente de cada uno. Mientras más actividades realicemos o nos sintamos capaces de realizar, mientras mantengamos las ilusiones, asumamos responsabilidades, hagamos nuevos amigos y cultivemos los que ya teníamos, mientras nos sintamos satisfechos con nuestros roles de padres, esposos, abuelos, hijos, amigos, no aceptaremos el rótulo de viejos porque tenemos todavía mucho por hacer, es tal vez nuestro mejor tiempo.
SESENTA AÑOS EN EL SIGLO XXI
Si miramos con cuidado podemos detectar la aparición de una franja social que antes no existía: la gente que hoy tiene alrededor de sesenta años. Es una generación que ha pateado fuera del idioma la palabra "sexagenario", porque sencillamente no tiene entre sus planes actuales el hecho de envejecer. Se trata de una verdadera novedad demográfica parecida a la aparición en su momento, de la "adolescencia", que también fue una franja social nueva que surgió a mediados del siglo veinte para dar identidad a una masa de niños desbordados en cuerpos creciditos, que no sabían hasta entonces dónde meterse, ni cómo vestirse. Este nuevo grupo humano que hoy ronda los sesenta, ha llevado una vida razonablemente satisfactoria. Son hombres y mujeres independientes que trabajan desde hace mucho tiempo y han logrado cambiar el significado tétrico que tanta literatura rioplatense le dio durante décadas al concepto del trabajo. Lejos de las tristes oficinas de J.C. Onetti o Roberto Arlt, esta gente buscó y encontró hace mucho la actividad que más le gustaba y se ganó la vida con eso. Supuestamente debe de ser por esto que se sienten plenos...algunos ni sueñan con jubilarse. Dentro de ese universo de personas saludables, curiosas y activas, la mujer tiene un papel rutilante. Esta mujer pudo sobrevivir a la borrachera de poder que le dio el feminismo y en determinado momento de su juventud en el que los cambios eran tantos, pudo detenerse a reflexionar qué quería en realidad. Algunas se fueron a vivir solas, otras estudiaron carreras, otras eligieron tener hijos, otras fueron periodistas, atletas, o crearon su propio "YO S.A.". Pero cada una hizo su voluntad. Reconozcamos que no fue un asunto fácil y todavía lo van diseñando cotidianamente. Pero algunas cosas ya pueden darse por sabidas, por ejemplo que no son personas detenidas en el tiempo; la gente de sesenta maneja la compu como si lo hubiera hecho toda la vida. Se escribe, y se ve, con los hijos que están lejos y hasta se olvidan del viejo teléfono para contactar con sus amigos y les escriben en e-mail sus ideas y vivencias. Por lo general están satisfechas de su estado civil y si no lo están, no se conforman y procuran cambiarlo. Raramente se deshacen en un llanto sentimental. A diferencia de los jóvenes; ellos conocen y ponderan todos los riesgos. Nadie se pone a llorar cuando pierde: sólo reflexiona y toma nota, a lo sumo. La gente grande comparte la devoción por la juventud y sus formas superlativas, casi insolentes de belleza, pero no se sienten en retirada. Compiten de otra forma, cultivan su propio estilo...Ellos no envidian la apariencia de jóvenes astros del deporte, o de los que lucen un traje Armani, ni ellas sueñan con tener la figura tuneada de una vedette. En lugar de eso saben de la importancia de una mirada cómplice, de una frase inteligente o de una sonrisa iluminada por la experiencia. Hoy la gente de 60, como es su costumbre, está estrenando una edad que todavía NO TIENE NOMBRE, antes los de esa edad eran viejos y hoy ya no lo son, hoy están plenos física e intelectualmente, recuerdan la juventud, pero sin nostalgias, por que la juventud también está llena de caídas y nostalgias y ellos lo saben. La gente de 60 de hoy, celebra el sol cada mañana y sonríe para sí misma muy a menudo...Quizás, por alguna razón secreta que sólo saben y sabrán los de sesenta en el siglo XXI. ANÓNIMO
Ceci:
ResponderEliminarTe pasaste!! Què tal blog para lleno de cosas interesantes!! La conferencia de la escritora africana, Impresionante!! Còmo te demuestra, con què claridad e inteligencia, todas las ideas preconcebidas que todos tenemos frente a las diferentes culturas, y còmo si queremos un mundo mejor hay que abrir la mente y culturizarse y leer , siempre leer.
Mil gracias por tan generoso y valioso aporte.
Què lindo viaje y què lindas fotos las tuyas con Mario. Se les ve regios!!
Tambièn la guìa de teatros me va a servir ahora que voy a Buenos Aires. Por casualidad no viste "El ahorcado, diario de una pasiòn", que la daban en el teatro chiquito que està en el segundo piso del Cervantes? Es extraordinaria! A lo mejor ya la quitaron.
Otra vez, gracias. Un beso. chichi
Hola Ceci
ResponderEliminarQue interesante tu blog, no se como mandarte un comentario por ahi, me sale una cosa llena de datos tuyos pero por ningun lado dice enviar, me encanto la escritora africana, que interesante lo de las historias unicas, a mi me ha pasado cuando he viajado y he podido comprobar que del Peru tienen una historia unica y no se imaginan otra : quees un pais atrasado donde a nadie se le ocurre nada. Todos los temas interesantisimos y muy ilustrativos, mil gracias
lUCHA
bienvenido cielo azul......... Sonia
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