domingo, 17 de julio de 2011

Tu cuerpo ante el mío

YO NO QUIERO MÁS LUZ QUE TU CUERPO ANTE EL MÍO



Yo no quiero más luz que tu cuerpo ante el mío:
claridad absoluta, transparencia redonda.
Limpidez cuya extraña, como el fondo del río,
con el tiempo se afirma, con la sangre se ahonda..

¿Qué lucientes materias duraderas te han hecho,
corazón de alborada, carnación matutina?
Yo no quiero más día que el que exhala tu pecho.
Tu sangre es la mañana que jamás se termina.

No hay más luz que tu cuerpo, no hay más sol: todo ocaso.
Yo no veo las cosas a otra luz que tu frente.
La otra luz es fantasma, nada más, de tu paso.
Tu insondable mirada nunca gira al poniente.

Claridad sin posible declinar. Suma esencia
del fulgor que ni cede ni abandona la cumbre.
Juventud. Limpidez. Claridad. Transparencia
acercando los astros más lejanos de lumbre.

Claro cuerpo moreno de calor fecundante.
Hierba negra el origen; hierba negra las sienes.
Trago negro los ojos, la mirada distante.
Día azul. Noche clara. Sombra clara que vienes.

Yo no quiero más luz que tu sombra dorada
donde brotan anillos de una hierba sombría.
En mi sangre, fielmente por tu cuerpo abrasada,
para siempre es de noche: para siempre es de día.


Miguel Hernandez

1 comentario:

  1. Hola Cecilia!

    Bello el poema de Miguel Hernandez...Lleno de profundidad y energia...Me encanta tu pagina y te felicito sinceramente por tan excelente idea. He querido ir al Cocodrilo Verde muchas veces y siempre he encontrado algun obstaculo, pero lo hare una de estas noches.

    Un abrazo y seguiremos en contacto.

    Maria Elena

    ResponderEliminar

Tu comentario es de gran utilidad para para Abraelazuldelcielo. Ce.